La casa duerme. Solo el temblor de una vela y el roce de una pluma inquieta quiebran el silencio de Pemberley. El aire es denso, mezcla de roble encerado, papel cálido, y esa humedad verde que entra por la ventana entreabierta cuando la noche abraza las tierras húmedas.
Ha intentado escribir, ha salido a caminar bajo la oscuridad, buscando orden
pero todo lo conduce al mismo nombre. Ahora, junto a la llama vacilante, comprende que ya no queda orgullo que lo salve de sí mismo.
Este aroma es ese instante: madera noble, tinta, musgo verde, ámbar cálido y un fondo suave de bosque húmedo y pensamiento nocturno.
La noche que lo derrota, el deseo que lo empuja
y la decisión, firme y silenciosa, de ir a buscarla.
Intensidad media. El nivel de intensidad de un aroma siempre es relativo y se percibe de forma subjetiva por cada persona. Lo indicamos tan solo como guía comparativa.
