WOLF, ROR
Hoy es un día especial. Muy especial. Desde 2015 no me había llegado ningún proyecto interesante para Papiroverba, esa en que los autores están vivos. De repente, un día, se cruzó en mi camino el traductor José Aníbal Campos y vino a hablarme de Ror Wolf y unos hombres, varios hombres ¿varios? bueno, hombres. Además de poder regresar a los autores vivos, con los que se puede hablar y esas cosas de agradecer en el mundo de la edición, resultó que era la primera traducción de Papiroverba y, para colmo, era algo que tenía pendiente ¡RELATOS!
Hoy es un día especial por todo eso y porque la portada es del propio traductor. Mi querido José Aníbal Campos tuvo la gentileza de mostrarme sus cuadernos de trabajo, esos en los que durante años había ido traduciendo a pedacitos este libro que tan especial es para él. Ante ellos, yo vi la portada porque vi la traducción total y un homenaje a ella. El trabajo de traducción es difícil y no atraviesa por buenos momentos. Es evidente que se ha avanzado mucho pero hay que cuidar a todos los que trabajan el libro: autores, traductores, correctores, editores, libreros, impresores, lectores, todos formamos parte de un ecosistema frágil en que de nada sirven los méritos, las firmas o los reclamos si al final las facturas se quedan sin pagar.
Quizá ese es un extenso asunto del que hablaremos un día con mucha calma, quizá sean ellos, los y las traductoras, las que deban entrar en este blog un día y explicar lo que sucede, lo que hacen, lo que es y significa su trabajo.
Hasta ese día, congratulemonos con la nueva portada de la primera traducción íntegra de Hombres varios de Ror Wolf que José Aníbal Campos ha venido a ofrecernos.
Empezamos a maquetar ¿hay ganas?